REVIEW: Buried Inside, Chronoclast : Selected Essays on Time-Reckoning and Auto-Cannibalism

Relapse, 2005




De Relapse va la cosa ultimamente.
Actualmente de gira con High on Fire en su Blessed Black Wings Tour, los canadienses Buried Inside y su "Chronoclast" producido por Matt Bayles (Mastodon) son todo un soplo de aire fresco a la escena del Metal/Hardcore.

Concebido como un disco conceptual con una sola canción de 40 minutos, pero dividido en 10 partes, 4 de ellas instrumentales.
Atentos a los títulos del album, son muy reveladores:

1. Introduction
2. Time As Ideology
3. Time As Methodology
4. Time As Surrogate Religion
5. Time As Imperialism
6. Reintroduction
7. Time As Abjection
8. Time As Automation
9. Time As Commodity
10.Time As Resistance

El título completo es perfecto, Chronoclast: Selected Essays on Time-Reckoning and Auto-Cannibalism

ICONOCLASTA: 1-Persona que destroza iconos. 2-Persona que va contracorriente y su comportamiento es contrario a los ideales de la sociedad actual.

CRONO:1-Relativo al tiempo

El juego de palabras no puede definir mejor la idea!

Efectivamente, el tiempo nos controla, nos manipula, nos condiciona, nos ordena, nos regla...y aquí encontrareis una profunda disertación sobre el tema.
Las letras están a la altura de la música. Para muestra un botón, o varios:

"Time is the primary socializing tool".

"the wheel keeps turning and we all turn with it".

"The calendar year is an imperial narrative".

"The seven-day week is an imperial infliction".

"Time politics are power politics. No denial, no exception".

"Death comes in time. Death comes with time".

"As any crime shows the fragility of the law, as any corpse shows the fragility of the body, time bares fragility of the symbolic order. The violent revolt of being".

Menos mal que los metal heads son descerebrados que solo piensan en cerveza, tetas y motos...como cambia el cuento!

¿Que hay de lo que podemos oir en Chronoclast? Bueno...no vamos a negar que Neurosis comenzaron todo este rollo (Isis, Pelican, etc) pero eso no imposibilita que se esté escribiendo una nueva página en la historia de la música. Yo así lo creo.
Hay momentos en que creo que estoy en los 90 escuchando un grupo de Doom Metal. Otras a un grupo de Hardcore o Metal, y todo con una homogeneidad pasmosa.
Pianos, cuerdas, vientos hacen presencia en interludios casi progresivos.
Los gritos de Nicholas A. Shaw transmiten ira, agonía, frustración y se funden en un solo ser con las guitarras, que aunque llenas de melodía son hirientes y profundas (por momentos me recuerdan a las de Anathema!),
La escucha obsesiva de este "collage sónico" se vuelve compulsiva. No dejeis de oirlo. Me lo vais a agradecer...Estamos ante una "Obra Maestra".